Muchas veces hemos dicho que la ouija no es un juego, que por alguna razon alguien que hace la ouija no queda bien parado. Pues bien, hoy os contamos una historia bastante tenebrosa que tiene que ver con este juego
La mayoría de expertos en lo paranormal desaconsejan el uso de la ouija por personas no preparadas ya que se trata de una puerta a dimensiones desconocidas. En muchas ocasiones los espíritus que se ponen en contacto a través de la ouija son aquellos que residen en “los bajos planos astrales”. Estos espíritus suelen estar confusos por haber muerto de una manera violenta o repentina como el asesinato, el suicidio, etc… Por lo tanto, estas condiciones violentas, negativas y potencialmente peligrosas están presentes para todos aquellos que utilicen la ouija y no estén plenamente preparados para este tipo de comunicaciones espirituales.
Y la verdad es que hay pocos casos de experiencias positivas con la ouija, y esto sugiere que este canal esta mucho más en sintonía con los aspectos negativos de otros planos de existencia. Esto mismo es lo que lo ha ocurrido a una mujer británica, quien después de utilizar la ouija recibió una amenaza desde el más allá.
Amenaza desde el mas allá
Según publicó Daily Mirror, todo comenzó cuando Angela Jackson, residente en el Reino Unido, recibió un mensaje de su padre fallecido en una reunión espiritista.
“Mientras me tomaba una taza de té, me senté en la parte trasera de la sala llena de gente”, explicó Angela al Daily Mirror. “La psíquica se puso de pie, recorrió la multitud, entonces se fijó en mí y se puso a cantar un clásico de Jim Reeves. Sentí como me recorría un escalofrío por todo el cuerpo, era la canción favorita de mi padre Charlie, que falleció hace 20 años”.
Angela no se podía explicar cómo esa mujer podía conocer que esa era la canción favorita de su padre fallecido. Pero lo más sorprendente ocurrió segundos después, cuando la psíquica le dijo que tenía un mensaje importante de su padre.
“Tu padre tiene una advertencia para ti. Estas pensando en usar un tablero ouija, pero no lo debes de hacer. Correrás mucho peligro si la utilizas. No lo hagas”, dijo la psíquica.
Angela se quedó sin poder decir ni una palabra durante mucho rato, porque desde que era niña siempre había tenido fascinación por lo sobrenatural e incluso en ocasiones tenía sueños que se hacían realidad. Pero a pesar de la advertencia de su padre desde el más allá, Angela no pudo quitarse la idea de probar la experiencia de la ouija. Una noche, los vecinos de Angela la invitaron para pasar una noche experimentado con el tablero ouija.
“Nos encontrábamos en la casa, iluminada únicamente con la luz de las velas y sentados entre cojines en frente de la tablero ouija”, explicó Angela. “Mi corazón latía de emoción cuando colocamos nuestros dedos índices en la parte inferior del vaso que habían sobre la mesa. Y de repente comenzó a moverse en todas direcciones. Mi vecino Robert preguntó si había algún espíritu que quería comunicarse con nosotros. El vaso comenzó a moverse hacia diferentes letras, hasta que la final pudimos distinguir lo que quería decirnos: ANGELA.”
Al parecer el espíritu quería hablar con Angela, pero lo que ocurrió a continuación aterró a todos los presentes. El vaso comenzó a deletrear: “MUERE PERRA”, y la puerta del salón se cerró de golpe. Angela con voz tenebrosa preguntó quién era, y la respuesta fue: SATAN. Después de deletrear estas letras el vaso salió despedido contra la pared para romperse en mil pedazos.
“Sin pensarlo cerramos las luces y apagamos las velas. Nunca debí hacer esto”, dijo Angela.
Angela Jackson despues de sufrir la brutal agresion
Meses después de este incidente sobrenatural, Angela no podía quitarse de la cabeza lo que le había dicho la entidad negativa. En un principio todo quedó en un simple susto, hasta que una noche Angela se despertó gritando y sudando después de haber tenido una terrible pesadilla. Soñó que era atacada por un hombre que llevaba un martillo.
“Fue entonces cuando supe que las cosas habían ido demasiado lejos”, dijo Angela. “Estaba realmente asustada. Me prometí a mí misma que nunca más volvería a usar la ouija”.
Pero un día la amenaza sobrenatural se hizo realidad. Angela se disponía a visitar a su vecino cuando detrás de ella escucho las palabras “MUERE PERRA”.
“Detrás de mí oí una voz que me decía “Muere Perra”, explicó Angela. “Me quedé helada al oír esas palabras. Temblando de miedo, me di la vuelta para ver a un hombre con una camiseta blanca emergiendo de las sombras con un gran martillo en sus manos. Grité mientras me golpeaba en la cabeza con el martillo. Me golpeó de nuevo y sentí como la sangre corría por mi cara.”
Angela no pudo ver al atacante. Lo siguiente que recordó es despertarse en el hospital confundida y aturdida. Los médicos le dijeron que había sido atacada y que sufría de una fuerte fractura en el cráneo.
“Han pasado seis años desde el ataque. Nadie ha sido detenido y continúo estando muy asustada porque algún día la amenaza del espíritu se haga realidad. Si hubiera hecho caso a las advertencias de mi padre a través de la psíquica tal vez de esto no hubiera pasado. Pero ahora quiero advertir a todo el mundo: Nunca juegues con la ouija, el mal está al acecho en el más allá”, concluyó Angela.
Creemos que no hace falta decir mucho más a la traumática experiencia de Angela. Son muchos los casos que sugieren que la ouija es un portal a fuerzas oscuras desconocidas que aprovechan cualquier oportunidad para apoderarse de las almas de los seres más frágiles, y esta es una nueva prueba de ello.
No hay comentarios:
Publicar un comentario