sábado, 19 de julio de 2014

Mundo MAS Paranormal: Casos reales de objetos poseidos

Hoy toca hablar de casos reales de objetos poseídos. Algunos pueden pensar que se tratan de leyendas urbanas pero ahora comprobareis que tienen una historia real detrás

Durante muchos siglos ha habido historias sobre objetos como muñecas, juguetes, muebles o joyas que estaban poseídos. Algunos mantienen que los objetos poseídos tienen la energía psíquica residual o la energía de sus antiguos propietarios. La capacidad del espíritu de una persona a unirse a algo que estaba muy cerca en su vida no es del todo imposible. Si una mujer llevaba un anillo determinado durante toda su vida, no es difícil creer que algo de su energía espiritual todavía puede estar presente a lo largo de los siglos en la pieza de joyería, o un niña que tenía una muñeca preferida pude ser perfectamente un contenedor de su propia energía. También los muebles antiguos son condensadores energéticos de generaciones anteriores, siendo la actividad paranormal mayor si el mueble se mantiene dentro de la misma familia. ¿Podrían estos objetos contener el espíritu de sus dueños anteriores?

El Muñeco Robert ( Robert The Doll)

Una de las historias más populares es el del de muñeco Robert the Doll. El muñeco perteneció a un niño llamado Robert “Eugene” Otto de Key West, Florida, en 1906. Fue un regalo de una criada africana que trabajaba para su familia. La criada, que se cree que practicaba magia negra, no estaba contenta con la familia de Eugene y puso una maldición sobre el muñeco que se llamo Robert. No mucho tiempo después de haber recibido el muñeco, los padres de Eugene le oyeron hablar con el muñeco Robert, que incluso hablaba con una voz diferente. El niño culpaba al muñeco Robert de tirar los muebles al suelo, y los vecinos afirmaban que pasaba de una ventana a otra e incluso se le oía reír. Después de la muerte de Eugene en 1974, una nueva familia se mudó a la casa y descubrió que el muñeco Robert se había quedado en el ático. La nueva familia entregó el muñeco Robert a su hija, quien afirmaba que el muñeco realmente cobraba vida y le atacaba por la noche, incluso estaba convencida de que el muñeco intentaba matarla. En este caso, el muñeco no parecía estar conectado sólo a Eugene, pero si que tenia un poder sobrenatural.


Mandy, la muñeca embrujada

La muñeca embrujada canadiense llamada Mandy reside en un museo en Quesnel, Columbia Británica. Mandy fue traída al museo por su propietaria quien afirmó que cuando era dueña de la muñeca, oía el sonido de un bebé llorando en la noche. Después de que ella donó la muñeca al Museo Quesnel, los sonidos del bebé llorando comenzaron a escucharse en el museo, incluyendo los sonidos de pisadas cuando no había nadie. Los propios trabajadores afirman que los objetos se mueven o incluso desaparecen cosas misteriosamente.

La Isla de las Muñecas
México supera a muchos casos relacionados con objetos poseídos.La historia dice que Don Julián Santana se mudó a la isla como un ermitaño y fue perseguido por el espíritu de una niña que se ahogó. Santana sacaba las muñecas que encontraba en el canal y las colgaba como un santuario para que el espíritu de la niña que parecía estar obsesionada. El sobrino de Don Julián lo encontró muerto en la isla en el mismo sitio donde la niña había muerto ahogada. La isla es ahora una atracción turística, y los visitantes dicen escuchar las muñecas susurrando, además de afirmar que los ojos de las muñecas se abren y se cierran misteriosamente.


La casa de las muñecas
En 2010, la escritora y profesora de psicología/sociología Lisa Marcelino escribió un artículo en The Examiner, donde decía que ella estaba conduciendo a través de Englishtown, Nueva Jersey, cuando vio una vieja casa de muñecas de dos pisos en una venta de objetos de segunda mano en el jardín de una casa. Compró la casa de muñecas y se la llevó a su casa en Nueva York, donde ella la limpió y la pintó con la intención de restaurarla. Al día siguiente, ella y su marido se fueron a una tienda de arte para comprar los materiales necesarios, ella enfermó repentinamnente y gravemente teniendo que regresar a casa. Al día siguiente, invitaron a unos amigos a su casa, y sin ninguna razón aparente, los invitados comenzaron a discutir, no siendo una conducta normal en ellos. Las desgracias continuaron los días posteriores, un cuadro colgado encima de la casa de muñecas continuamente se caía, su conejo enano murió misteriosamente y el perro de la familia ladraba a la casa de muñecas sin ninguna razón. La pareja empezó a oír ruidos inexplicables en la noche, extraños sudores nocturnos y su marido parecía estar deprimido constantemente. Decidieron dejar en la acera la casa de muñecas donde alguien inmediatamente lo recogió y su casa volvió a su estado de paz.

Decidme ¿vosotros conocéis algún caso similar?

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